CAP 52: The first time.

[AVISO: EL CAP SE VIENE HOT. POR LAS DUDAS. ESPERO QUE LES GUSTE, LAS AMO ]

MARATÓN, PARTE 3.

******: ¿Qué es lo que sí es sexy?- ambos alzamos la cabeza divertidos, viendo como Louis se sentaba a mi lado. Los chicos también habían irrumpido en la habitación, sentándose en los sillones libres. Noté como Harry se sentaba en el sillón frente al nuestro, mirándonos atento, demasiado atento.

Tu: Am, nada, cosas nuestras- me apresuré a decir. No es que estuviéramos haciendo diciendo nada malo.. bromeábamos sanamente. Pero aún así mis mejillas se sonrojaron..

Niall: Bueno..- no parecía muy convencido- ¿y por qué te pones colorada?- el día que comience a anotar todas las cosas inoportunas que dice o hace mi mejor amigo, no termino más.

Tu: Porque hace calor- ¿hasta ahí llega tu capacidad de imaginación _____(tu nombre)? No pienso muy bien por las mañanas.

Todos me miraron con cara de ‘’estás loca’’, menos Zayn, que sonreía como un mono.

Tu: Espero que no sonrías así cuándo tus lindas fans vengan a denunciarme por maltrato animal- fingí estar seria, para luego reír. Cuatro pares de ojos me miraron si entender. Pero al menos desvié la atención de mi estúpida escusa.

Liam: ¿Eh? ¿qué hiciste?- preguntó desconfiado y a la vez divertido.

Tu: Nada… raro- Zayn rió- pero ahora piensan que estoy loca.

Zayn: ¿Y eso es mentira?- repuso gracioso, ganándose un golpe en el brazo por mi parte. Rió, masajeándoselo.- oye, no soy un animal, no es necesario maltratarme a mí también.

Tu: Jodete- me limité a decir, sonriendo. Los chicos nos seguían mirando totalmente excluidos de la conversación.

Niall: No entiendo nada- expuso,  rascándose la cabeza- ustedes son raros.

Tu: Decime algo que no sepa Nialler- bromeé, generando risas.- ¿Les conté?- comenté, cambiando de tema- el padre de Harry y mi madre vuelven hoy- miré a Harry, que seguía con esa expresión suya, como pensativa, en el rostro- Mamá me llamó hoy, dice que vuelven como a las nueve y media, diez- le informé.

Louis: ¿Eso significa que te irás?- preguntó un poco desanimado- si quieres puedes quedarte..- propuso.

Tu: No es como si me vaya de Londres tonto, son solo unas casas de distancia- sonreí dulcemente- además tengo mi cuarto allí y todas mis cosas. Pero gracias.

Louis: Ya, pero, ¿y si luego tú estás muy ocupada con tus amigas y te olvidas de mi?

Tu: Entonces irás a mi casa y me gritarás hasta que recuerde tu nombre- bromeé.

Liam: Bueno, pero a la menor señal de que te aburres en tu casa, vuelves ¿prometido?

Tu: -rodeé los ojos, enternecida- son unos exagerados. Me mudo a pocas casas de aquí. No es como si no los volviera a ver.

Liam: Pero aún así- frunció el ceño, de manera tierna.

Tu: Les aseguro que se cansarán de mi- prometí- ahora ¿me abrazan y dejan de ser tan gruñones?- ambos se levantaron de sus asientos, al igual que yo, y me dieron un dulce abrazo. En serio que son geniales estos chicos.

Alguien carraspeó a sus espaldas.

Harry: ¿Y para mí no hay un abrazo? Que yo sepa también vivo aquí- comentó fingiendo estar ofendido, con ojos pícaros. Rodeé mis ojos mientras Harry se acercaba a mí, y me estrechaba fuertemente contra su pecho. Le respondí el abrazo con la misma intensidad, inhalando su aroma. Sentí como murmuraba en mi oído:

Harry: Deja de ser tan linda con Zayn, me vas a volver loco- me ericé al sentir su cálido aliento en mi oreja.

Tu: Deja de ser tan celoso, es tonto- repuse, disolviendo el abrazo sonriente, mientras él reía bajito. Esta vez no volví a mi lugar original, y me senté acurrucada contra Harry.

Harry: Oye ¿y si hacemos algo porque te mudas?- preguntó mientras jugaba con un mechón de mi pelo.

Tu: ¿Otro más? Son demasiado exagerados chicos- repliqué, cariñosamente.

Harry: Es que será raro no tenerte aquí. Una especie de pequeña despedida- propuso.

Liam: Me apunto ¿qué les parece ir al cine?

Niall arrugó la nariz.

Niall: Al cine no, me aburro. ¿Y si vamos al parque de diversiones?

Louis: ¡SI!- chilló mí muy chillón amigo. Que sorpresa- ¿a cuál vamos?

Zayn: Saben, he oído que ese parque nuevo, el Winter Wonderland (no es nuevo, pero ta)- es genial. Deberíamos ir.

Harry: ¿Hay montañas rusas?- preguntó receloso. Solté una risita.

Tu: En todos los parques de diversiones hay montañas rusas Harry- dije obvia. Me miró no muy lindamente.

Harry: Disculpame señora sabelotodo-

Louis: No le hagas caso ______(tu nombre)- intervino- se pone así porque le tiene miedo a las montañas rusas- enarqué una ceja.

Tu: ¿En serio?- pregunté sorprendida. No sé, digamos que Harry no parece el tipo de chico que le teme a una… montaña rusa.

Lo cual me parece lindo, y no tengo idea de por qué.

Harry: -asintió, de malhumor- si vas a hacer un comentario tonto, mejor guárdatelo para ti- me advirtió, cruzándose de brazos. Supuse que los chicos siempre lo jodían con eso, y por eso mostraba esa actitud.

Me encogí de hombros.

Tu: De hecho, te iba a decir que me parece genial- me limité a decir, sincera.

De reojo, pude ver cómo las comisuras de su boca se arqueaban hacia arriba, y sus ojos me miraban profundos, como si estuviera viendo algo en mí por primera vez.

(Horas más tarde)

Louis: ¿ESTÁS PRONTA?- me gritó Louis desde el living de su casa. Me terminé de aplicar un poco de rímel y comprobé mi aspecto en el espejo, antes de bajar. Estaba vestida así:

Tu: VOY- salí de la habitación rápidamente y bajé las escaleras hasta llegar a la planta baja, dónde me estaba esperando, con las llaves del auto en sus manos.

Ambos salimos hacia la fría tarde de Londres -hoy el frío era insoportable- para reunirnos con los demás chicos en la entrada del parque, como acordamos. La razón por la que no iban con nosotros es que pasaron a buscar a las chicas, a las cuáles también habíamos invitado. Luego de unos treinta minutos –el parque estaba en el Hyde Park- llegamos, y fuimos a boletería para comprar nuestras entradas.

Tu: Bien, ¿cuánto es?- pregunté, mientras buscaba en mi bolso el monedero. Louis chasqueó la lengua.

Louis: Tu no vas a pagar, yo invito- respondió muy convencido, a la vez que sacaba su billetera del bolsillo y buscaba efectivo.

Tu: ¿Qué? no, ni hablar- repliqué- yo pago por mi entrada.

Louis: Hoy es un día especial, así que pago yo- me aseguró, con ojos divertidos.

Tu: ¿Qué tiene de especial venir a un parque de diversiones? no soy una niña, yo pago por mis propias cosas..

Louis: Considéralo un regalo de despedida..

Tu: ¿Otra vez con eso? ¡que no me voy a ningún lado! –protesté-

Louis: Como sea enana, pago yo y punto- se volvió hacia la cajera nuevamente.

Tu: ¡No me digas enana!- me quejé, por enésima vez en el día. El día que deje de llamarme así, juro que haré una fiesta.

Louis: -volvió a voltearse hacia mí, divertido- ¿y qué eres?

Tu: ¿Una persona de baja estatura?- respondí dudosa, haciendo que riera. Puse las manos en mis caderas- ¿acaso estás diciendo que no puedo pagarme mi propia entrada por ser más baja que tú? ¡eso es discriminación!- alcé la voz, molesta, más aún porque la cara de Lou parecía un poema; estaba rojo de aguantar tanta risa.

La gente de detrás nuestro en la fila ya comenzaba a quejarse de por qué tardábamos tanto. Eso, o se reían en voz baja de nosotros. De mi, principalmente.

Louis: ¿Yo? –se llevó el dedo índice al pecho, intentando no reír- para nada.

Tu: Compra tu entrada y quita tu enorme culo de la fila o lo muevo yo misma- le aseguré, entrecerrando los ojos en su dirección.

Louis: -se encogió de hombros- claro enana- se volvió a la cajera, visiblemente molesta y a la vez divertida por nuestra pequeña ‘’discusión’’, entregándole dinero en efectivo, y tomando dos papeles azules y largados que le estaba ofreciendo la muchacha. Se volvió en mi dirección nuevamente, y enganchando su brazo con el mío me alejó de allí, pese a mis protestas.

Tu: ¿Qué parte de ‘yo compro mi propia entrada’ no entendiste?- exigí molesta, al tiempo que tomaba el boleto que Lou me extendía.

Louis: -rió, ajeno a mi frustración- una chica normal estaría encantada de que le compre una entrada para el parque de diversiones.

Tu: Olvidas que yo no soy normal- repuse- además ¿viste la cara con la que nos miraba la cajera? ¡ahora se debe de estar riendo de nosotros!

Louis: ¿Y los que estaban detrás nuestro? Pensé que nos filmarían y lo subirían a You Tube- agregó, riendo. Recordé sus murmullos y solté una carcajada, contagiándome del ojiverde. Continuamos riendo y haciendo comentarios relacionados a nuestra estúpida discusión, cuándo un potente grito nos llamó.

Ambos giramos la cabeza al mismo tiempo, viendo como Liam, Nátali y Niall venían hacia nosotros. Fuimos a su encuentro, intentando parar nuestras risas.

Tu: Hola chicos- saludé seguida de una pequeña risita, al igual que Lou. Los tres nos miraron entre confusos y divertidos.

Liam: ¿De qué se ríen?

Tu: Larga historia- me limité a decir, mientras Louis y yo saludábamos a Nátali con un beso en la mejilla. Estaba vestida así:

Nátali: _____(tu nombre), ¿cómo estás?- me saludó con una sonrisa tímida pero simpática. Le sonreí a su vez.

Tu: Bien ¿y tu?

Nátali: Bien gracias. Estábamos esperándolos..- se vio interrumpida por su primo, que en ese momento devolvía su BlackBerry al bolsillo de sus jeans- me llamó Harry diciendo que a viene, está con Zayn, Male, Ari y una amiga de Ari- nos informó- ¿la conoces?- se refería a Vivien.

Tu: Si, bueno, no- todos me miraron confundidos- o sea, solo hablé con ella una vez- expliqué- sin embargo, me pareció simpática. Vino de Alemania, por un intercambio o algo así. Se está quedando en lo de Ari- les conté.

Nátali: Si, me pareció buena onda- agregó.

Niall: Genial, esperémoslos entonces. Ya quiero subirme a los juegos- comentó emocionado, dando pequeños saltitos. Nos quedamos hablando mientras esperábamos a los demás.

-Fin de Tu Narración-

-Narra Niall-

Nos habíamos ubicado cerca de la boletería, pero no muy a la vista de las personas, de manera que podríamos ver cuándo los chicos llegaran, y al mismo tiempo ocultarnos de los fans que pudieran andar por allí. No es que nos molesten los fans, es más, nos encanta conocerlos y ver las enormes sonrisas en sus caras al vernos, pero esa noche estábamos con las chicas y no queríamos incomodarlas; a veces nuestras niñas podían ponerse algo locas.

Luego de unos pocos minutos charlando e intentando no quedarme quieto para mantener el calor en mi cuerpo –hoy Londres estaba helado; cada vez que hablaba una gélida nube de aliento flotaba en el aire- sentí mi celular vibrar, y al sacarlo del bolsillo, vi que tenía un mensaje de Hazz.

-Ya llegamos. ¿Dónde están? No los vemos

Niall: Chicos, ya llegaron los demás- les informé; comenzamos a caminar en dirección a la entrada. Allí estaban parados los cinco, hablando entre ellos y mirando para todos lados, adiviné que buscándonos. Nos acercamos a ellos, intentando mantener el perfil bajo para no llamar la atención ante posibles fans.

Niall: ¡Hola gente!- casi grité, para que nos vieran. Bien, supongo que eso no es mantener el perfil muy bajo, pero.. ¡es la emoción! Estamos en un parque de diversiones, entiéndanme.

Los cinco se giraron en nuestra dirección y… luego la vi.

Allí, junto a Ari, había parada una chica hermosa. Rubia, alta, delgada, y con el aspecto de un ángel, lo juro. Simplemente.. wow.

Liam: Eh, Niall, disimulá un poco- me susurró mi amigo al pasar por mi lado, en dirección a ellos. Me recompuse, y caminé rápidamente junto a los demás. Me acerqué a la chica.. tenía unos ojos preciosos. Azules, con un borde amarillo-dorado rodeando la pupila.

(Estaba vestida así)

Niall: Hola- la saludé torpemente, sonriendo.

******: Hola.. ¿Niall, no?- dijo dudosa. Asentí, confuso pero encantado de que supiera mi nombre.

Niall: Sip, ¿y tu?- intenté sonar relajado, pero los nervios me comían vivo. Lo que es extraño, porque no suelo ponerme nervioso con las chicas. Antes si, pero con todo esto de One Direction, digamos que lo he superado. Entonces esto se vuelve.. raro.

******: Me llamo Vivien- se presentó, saludándome tímida y suavemente en la mejilla. Inhalé disimuladamente su aroma; quizás suena raro, pero es lo que siempre hago. Necesito saber cómo huele una chica ¿no?

Bien, de acuerdo, eso sí que sonó raro.

Tu: Hola Vivien- se acercó para saludarla con un beso, interrumpiendo nuestra conversación. ¿Pero qué digo? Solo nos presentamos.

Niall James Horan, tranquilízate.

Vivien: Hola, _____(tu nombre) ¿cómo estás?- le devolvió la sonrisa.. que sonrisa.

Tu: Bien ¿y tú? Veo que ya conociste a Niall..- mi mejor amiga me miró de reojo, con expresión cómplice. ¿Eh? ¿qué me mira así? ¿qué tengo?

Vivien: Claro- me sonrió tímidamente.

En eso Louis y Liam se acercaron a presentarse, y yo me fui a saludar a Ari y Male, que charlaban con Harry. Luego de unos pocos minutos, nos internamos en el parque. 

-Fin de la Narración de Niall-

-Narras Tu-

Un rato después de que llegaran los chicos, fuimos a explorar el parque. Se notaba que era nuevo; los juegos y tiendas estaban en perfectas condiciones. Primero recorrimos todo el parque, y, a pedido de Liam –siempre tan responsable, ya saben- establecimos un punto de encuentro por si alguno se perdía o algo. Algo inútil, ya todos tenemos celulares, pero bueno.

Niall: ¡Vayamos a los juegos ya!- pidió entusiasmado, y todos estuvimos de acuerdo. Por mayoría, fuimos primero a las montañas rusas. Harry insistió en que no pasaba nada, y que no le daban tanto miedo, así que subimos todos. En todo el rato me sostuvo la mano fuertemente, pero creo que no la pasó tan mal. Claro que para la segunda montaña rusa, nos quedamos los dos abajo.

Luego de unos cuantos juegos más, fuimos al tren fantasma; esta vez fue el turno de Harry consolarme mientras me cagaba hasta la bombacha. ¿Les dije que odio los trenes fantasmas? ¿no? bueno, los odio. Son horribles. Aunque este lo odié un poquito menos; los brazos protectores de Harry a mi alrededor lo hicieron más soportable.

Finalmente, terminó, y al salir noté que no era la única blanca como un papel. Ari y Nátali estaban igual. Solo que Louis y Liam eran los que las contenían. Me alegré por ellas; sabía que a Ari le gustaba Lou. Aunque él seguía con Elanor, ser lindo con Ari no era algo malo. Y Liam.. por favor, se le notaba desde lejos que algo pasaba con Nátali. Aunque bueno, Liam es Liam. Es difícil saber lo que siente a veces.

Tu: El peor tren fantasma de mi vida- comenté, una vez que nos alejamos de allí e íbamos a un restaurante a comer algo; ya había anochecido y teníamos todos hambre.

Ari: Ni que lo digas- se quejó- casi me hago pipí del susto- todos rieron, menos Nátali, ella y yo, que todavía estábamos traumadas.

Tu: No se rían- me quejé.

Zayn: Es que tendrían que ver sus caras..- comentó gracioso, generando más risas. Lo miré feo, y me sonrió ampliamente- perdón. Te ganaré un osito para que te sientas mejor ¿quieres?- propuso, con ojos tiernos, haciéndome sonreír.

Tu: ¡Si!- amo los peluches de los parques de diversiones. Sobre todo porque nunca gano ninguno..

Desviamos nuestros pasos hasta los puestos de juegos, y nos repartimos en pequeños grupitos. Convenientes. Louis, Ari y Harry se fueron a un puesto; Niall, Nátali, Vivien y Liam a otro y yo y Zayn a otro. Nuestros boletos incluían el paquete de todos los juegos del parque, por lo que no tuvimos que pagar nada.

Luego de un rato, obtuvimos los premios. Zayn consiguió ganarme un oso gigante y blanco, con una moña roja en el cuello. Decidí llamarlo Zayn, porque bueno, ¿me lo dio Zayn? Y además necesitaba un nombre varonil, teniendo en cuenta ese lazo un poquito afeminado.

Las chicas también tenían sus peluches, por lo que todos satisfechos, fuimos a cenar por fin. Muero de hambre.

Comimos en un pequeño restaurante lleno de gente. Y claro, no tardaron en reconocer a los chicos. Prácticamente todos los adolescentes y niños que había en el lugar se acercaron para pedir una foto, un autógrafo o solo saludar. Los chicos se disculparon repetidas veces con nosotras, pero no era que nos molestaba ni nada. Por lo menos a mi. Al contrario, me parecía lindo cómo trataban a sus fans, y las abrazaban y besaban. Se veían tan tiernos y nada falsos. Sus sonrisas eran sinceras.

Liam: Bueno ¿nos vamos?- Ya casi eran casi las nueve, y mis padres llegarían en un rato, así que nos apresuramos a pagar y salir del restaurante. Atravesamos el parque riendo y charlando, hasta la entrada. Ya estábamos llegando al estacionamiento, cuándo algo húmedo calló en mi cabeza.

Alcé el rostro hacia arriba, pensando que era lluvia, pero me encontré con diminutos copos blancos cayendo sobre nosotros.

¿Nieve?

Niall: ¡Está nevando!- exclamó feliz, sonriendo como un nene. Instantáneamente sonreí enormemente, al igual que todos. ¡Nevaba! Nunca había visto la nieve. Esto es genial.

Vi cómo el piso se cubría rápidamente por un manto blanco, y todos nos abalanzamos para tomar bolas de nieve y comenzar una guerra.

Sin pensarlo mucho, las chicas por un lado, y los chicos por otro, comenzamos a lanzarnos bolas de nieve, riendo como idiotas. Y estuvimos así por unos largos minutos, hasta que comencé a sentir mi cuerpo entumecerse por el frío.

Tu: Eh, chicos, me estoy congelando- comenté, viendo como Louis le tiraba una bola de nieve en la cara de Niall, riendo como un desquiciado.

Liam: Si, mejor vamos yendo ¿no?- todos estuvieron de acuerdo, y nos encaminamos hasta los autos. Y yo estaba en eso, cuándo siento cómo dos fuertes brazos me alzan en el aire.

Tu: ¡Harry! ¿Qué haces?- pregunté riendo, mientras fríos copos de nieve caían sobre nosotros.

Harry: ¿No que todas las chicas sueñan con un beso bajo la nieve?- preguntó con sus ojos brillantes. Sonreí.

Tu: En realidad, es con un beso bajo la lluv…

Harry: Te amo- me interrumpió, uniendo su boca con la mía, sin previo aviso.

¿Les mencioné cuánto me gusta la nieve? Definitivamente, ahora es una de mis cosas favoritas.

(Rato después)

Una vez que dejamos a Ari y Vivien en su casa, Harry y yo fuimos hasta la mía, a esperar a nuestros padres. Ya eran casi las diez, por lo que deberían de llegar en cualquier momento.

Tu: Iré a cambiarme- anuncié, dejando mis llaves sobre la mesita al lado de la puerta.

Harry: Dale. Voy a preparar chocolate caliente ¿quieres?- me abrazó cariñosamente por mis hombros, mirándome con expresión dulce.

Tu: Ok- subí rápidamente las escaleras hasta mi habitación. Hacía días que no entraba allí.. ¿cuánto, 2 semanas? O más.

Me quité la ropa húmeda y helada, quedando solamente en ropa interior, y corrí hacia la ducha de mi baño. Estaba congelada, y necesitaba una ducha de agua caliente urgentemente.

Después del baño me sentí mejor, y luego de cambiarme por esto (abajo), bajé.

Tu: ¿Harry?- lo llamé, al no encontrarlo en la sala. Fui hasta la cocina; estaba hablando por teléfono con alguien. Al verme, me sonrió, señalando con la cabeza dos tazas humeantes de chocolate. Tomé una y me senté en uno de los bancos de la mesada, atenta a su conversación.

Harry: Si..no, está bien… si, hace un rato. Estábamos en un parque de diversiones… claro… de acuerdo. No se preocupes… Llámenme cuándo sepan algo, adiós- colgó, y se giró hacia mí con expresión algo preocupada.

Tu: ¿Pasa algo?- quise saber, dándole un sorbo a mi chocolate caliente.

Harry: Era mi padre- se sentó frente a mí, tomando su taza- dicen que suspendieron el vuelo por la nieve.

Tu: ¿Qué? ¿por?

Harry: No sé, medidas preventivas supongo. No te preocupes, mañana llegan. Pero me pidió que me quedara contigo, por las dudas.

Tu: -enarqué una ceja- ¿y que se supone que harás? ¿quitarás la nieve de la entrada?- pregunté divertida.

Harry: Bueno.. estaba pensando en otras cosas- se limitó a decir con voz increíblemente sexy. Sonriendo burlonamente, me terminé el chocolate y coloqué la taza en la mesada; limpié los restos que pudieron haber quedado en mi boca con una servilleta que había allí y fui hasta la sala, a ver un poco de tele.

A los pocos minutos irrumpió Harry en la habitación, y sin decir una palabra, se sentó a mi lado en el sillón. Me acurruqué contra él mientras pasaba los canales, buscando algo interesante para ver. Al final, encontré un canal en dónde pasaban ‘Beauty and the beast’ y lo dejé, distraída.

Estuvimos algunos minutos sumidos en completo silencio, solo con el ruido de la tele de fondo. Harry, que había estado todo el rato jugando con un mechón de mi cabello –comienzo a sospechar que es su pasatiempo favorito- se giró hacia mi y habló.

Harry: No quiero ser pesado pero.. ¿puedo preguntarte algo?

Intenté suponer con qué me iba a salir ahora.

Tu: Am, claro.

Harry: Eh.. sé que me dijiste que no pasaba nada y eso pero..- ya comenzó a divagar. Cuándo divaga es porque está nervioso.

Tu: Al grano Harry- ya conocen mi impaciencia. Lo suspirar.

Harry: ¿Entre tú y Zayn no hay nada, nada de nada?

Tu: ¿Otra vez lo mismo?- ¿es joda? Cuándo va a entender que no. Es más terco que yo, por dios.

Harry: Me dijiste que podía preguntarte- se defendió.

Tu: No preguntarme cosas idiotas- repuse.

Harry: No es idiota. Es importante.

Tu: Es idiota que sigas pensando que siento algo por Zayn, o por cualquiera.

Harry: Tu no lo entiendes..

Tu: Es obvio que no- bien, esto me está frustrando. ¿Es que siempre me va a salir con lo mismo? Pensé que habíamos dejado claro esto de Zayn.

Harry: Escúchame- clavó sus ojos en los míos- te veo reír con Zayn. Hoy de mañana.. él regalándote un oso hace un rato.. ¿qué quieres que haga? Es natural que piense que quizás algo pasa.

Tu: -rodeé los ojos, impaciente- Lo que no es natural es que no confíes en mi. Si tanto me amas, créeme cuándo te digo que Zayn no me importa de esa manera ¿entiendes? Somos buenos amigos. Lo quiero. Pero hasta ahí.

Harry: Ya, pero, ¿y el oso?

Tu: -bufé- eres tan insoportable a veces ¿lo sabías?

Harry: No camb…

Tu: El oso- me acerqué peligrosamente a su rostro, decidida a zanjar el tema- me importa una mierda- dicho esto, choqué mis labios contra los suyos, para que entendiera de una vez.

Una milésima de segundos después, sus labios respondieron a los míos, y comenzó a besarme, lenta y tiernamente, sin lengua. Comencé a acariciar el cabello en su nuca, al mismo tiempo que sus dos manos se posaban en mis mejillas, atrayéndome más hacia él.

De un momento a otro, el beso empezó a ser cada vez menos tierno. Ambos queríamos más. Con mi lengua, contorneé su labio inferior pidiendo acceso a su cavidad bucal, el cual se me fue concedido en seguida. Y entonces ambas lenguas comenzaron a debatirse entre quién dominaba en el beso, mientras nuestras caricias aumentaban, y dejaban de ser tan inocentes.

Luego de unos minutos de besarnos salvajemente en el sillón, mis pulmones –muy inoportunos, por cierto- reclamaron aire, y a duras penas, me separé unos milímetros de él. Mientras ambos recuperábamos el aliento, sus ojos me miraban fijos, penetrantes. Al instante, supe lo que me querían decir, y admito que no me opuse. Solamente necesito esa confirmación en mi mirada, para alzarme en el aire mientras se paraba del sillón, invitándome a rodear sus caderas con mis piernas, cosa que no tardé en hacer.

Avanzó torpemente hacia las escaleras, besándome locamente de nuevo. Después de lo que me parecieron horas, llegó hasta la planta alta, y chocó mi espalda contra la pared, bajando sus besos hasta mi cuello y dejando allí pequeños mordiscos. Gemí, lo que provocó que me besara y mordiera con más frenesí, deteniéndose en un punto específico. Caí en la cuenta, tarde, de que me estaba dejando una marca.

Tu: ¡Harry!- me quejé, aunque disfrutando de la sensación de sus labios contra mi piel. Se separó en seguida, mirándome con sus ojos pícaros.

Harry: Eso es para que todos sepan que eres mía- me susurró, antes de abalanzarse nuevamente a mis labios, colando sin permiso su lengua. Me alejó de la pared, y caminamos aún besándonos, en línea casi recta por el pasillo, hasta mi cuarto. Abrió tanteando la puerta, e irrumpimos precipitadamente en le habitación, sin dejar de besarnos salvajemente. Esta vez, fui yo la que llevé mis labios a su cuello, y sonreí contra su piel de satisfacción cuándo un pequeño pero audible gemido se escapó de sus labios. Ya iba a devolver mi boca a la suya, cuándo se me ocurrió marcarlo al igual que él lo había hecho. Le tardó unos pocos segundos en averiguar lo que quería hacer, y rió levemente.

Harry: Eres tan sexy- susurró  con una voz extremadamente ronca. Sus manos bajaron hasta mi trasero apretándolo fuertemente, al mismo tiempo que caminaba hacia la cama; mi cama.

Aún besándonos, me recostó cuidadosamente en la cama, y comenzó a sacarme el buso, mientras yo hacía lo mismo con el suyo. En estos momentos, la ropa es lo único que estorba.

Una vez que mi vientre y brasier quedaron al aire, separó sus labios de los míos, echándome una rápida mirada, antes de llevar una de sus manos a la parte trasera de mi espalda. Dudó un momento, buscando confirmación en ms ojos, y al ver lo que tenía que ver, desabrochó el gancho, haciendo que mis pechos quedaran totalmente expuestos.

Esta vez nada de rápidas miradas; me recorrió con los ojos de arriba abajo, deteniéndose especialmente en la parte superior de mi torso. No pude evitar sonrojarme mucho, deseando que apartara su mirada de una  vez.

Tu: Harry..

Harry: Sos perfecta- se limitó a decir, antes de ir hasta mi cuello, bajando lentamente mis jeans. Gemí, sabiendo que lo hacía a propósito. Finalmente quedé únicamente en bombacha, y sus ojos no tardaron en recorrer mi cuerpo nuevamente, relamiéndose los labios. Incómoda ante tanta miradita, llevé mis manos hasta su cinturón y lo desprendí inexperta. De bajarse el pantalón se ocupó él, torpemente, quedando solo en bóxers negros de Tommy. Me mordí el labio, mientras inspeccionaba su cuerpo de arriba abajo. Mis ojos se toparon con una fuerte erección dentro de sus bóxers, lo que me exitó más. Lo quería dentro de mí, ya.

Empujé con mis manos su rostro hacia él mío, uniendo nuevamente nuestras bocas. Su mano se dirigió al borde de mi bombacha, sin bajarla, solo jugando con ella. Gemí, impaciente. Finalmente, me despojó totalmente de la única prenda que me cubría, quedando completamente desnuda frente a él. Tras recorrerme con los ojos completamente –bien, si antes me dio vergüenza, ahora aún más- se apresuró a bajarse él mismo sus bóxers, dejando fuera su potente erección. Al igual que él, recorrí su cuerpo totalmente, admirando lo sexy y bueno que estaba.

Y es solo mío, pensé.

Se alejó un poco de mí, y estiró un brazo hasta sus pantalones, sacándo del bolsillo trasero su billetera. De allí extrajo un sobrecito plateado, el cual adiviné que era un condón. Sin pensarlo mucho, lo arrebaté de sus manos y rasgué el envoltorio con mis dientes. Gracias a las clases de salud sexual que nos había brindado mi colegio en _____(tu país), sabía cómo colocarlo, así que lo hice, dejando un poco de espacio en la punta.

Alcé la vista hasta los ojos de Harry, que me miraban fijamente, abrasadores.

Harry: Eso fue malditamente sexy. Quiero hacerte mía, ahora- sin decir más, introdujo dos dedos en mi zona íntima para preparar el terreno, mientras sus labios viajaban a mis pechos esta vez. Se entretuvo un poco en esto último, proporcionándome placer. Gemí, una vez que retiró los dedos de mí, y se posicionaba para penetrarme.

Tu: ¡Espera!- se paralizó en el lugar.

Harry: ¿Qué pasa?- preguntó jadeando, con preocupación.

Tu: Es que.. soy virgen Harry- bien, lindo momento para mencionarlo. Estúpida, estúpida ______(tu nombre).

Harry: ¿Confías en mi?- asentí- te prometo que te voy a cuidar.- evaluó mi rostro, con ojos tiernos y a la vez deseosos- al principio te dolerá, pero luego solo vas a sentir placer. ¿Estás lista?- nuevamente asentí, y eso fue suficiente para que Harry penetrara con fuerza en mi.

Clavé con fuerza mis uñas a las sábanas, mordiéndome el labio para no gritar. Sentí cómo Harry llegaba hasta el fondo, y salía. Me besó, mientras volvía a embestir en mi, y esta vez casi no me dolió. Repitió el mismo proceso varias veces, haciéndome gemir su nombre, en medio de tanto placer. Comenzó a penetrarme más rápido, hasta que finalmente sentí una abrumadora y placentera sensación, al mismo tiempo que Harry, quién llegó al orgasmo conmigo.

Jadeé, agotada, mientras Harry se desplomaba a mi lado, en el mismo estado que yo.

Harry: Eso fue increíble- lo escuché decir. Sonreí, cansada, girándome para mirarlo. Gotas de sudor se agolpaban en su frente, dándole un aspecto demasiado sexy. Al notar que lo miraba, giró su rostro en mi dirección- te amo ______(tu nombre).

Y en el fondo, supe que yo también lo hacía.

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Chicas, holaaaa. Acá tienen la tercera y última parte del martón. Tarde, pero llegué (: sé que dije que iba a subirlo el fin de semana, y luego el lunes, pero he estado todos los días con los escritos y unos problemas familiares, y se me complicó. Pero hoy no fui al liceo porque estoy enferma –mañana tampoco voy, así que si puedo y me da la mente subo en la de Niall. no prometo nada- así que aproveché para subir el capítulo que les debía. ¿Les gustó? Capaz que fue un poco hot o no sé.. pero varias me pidieron 1313 con Harry, así que bue. Rayita ya no es virgen (?

En fin, las dejo, me voy a dormir. Las amo, comenten mucho. <3

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