*****: ¿_____(tu nombre)?- preguntó
el chico frente a mí, con sorpresa en su voz. Me miraba atónito, como si...
Como si no me hubiera visto en años.
Tu: ¡Drew!- exclamé, antes de
correr directo a sus brazos.- Dios, te extrañé tanto...
Drew: ¿Qué carajos hacés acá?-
preguntó, más bien exclamó, sonriendo, mientras me estrechaba firmemente entre
sus brazos, prácticamente ahogándome. Yo, feliz de morirme ahogada allí mismo.
Nunca hubiera imaginado volver a verlo, mucho menos en Londres. Lo que me
recuerda...
Tu: ¿Vos qué hacés acá?- indagué,
alzando el rostro para poder verlo mejor, sin soltarme de nuestro fuerte
agarre. No podía parar de sonreír como una estúpida, y él estaba igual que yo.
Drew: Vine a visitar a mis tíos por
Navidad, aprovechando que a mi padre le dieron vacaciones...
Tu: O sea que tu tía es la madre de...
Niall: ¡Mía!- exclamó detrás de
nosotros. Ambos nos giramos- no es necesario aclarar que no nos habíamos separado,
ni teníamos la intención de hacerlo- viendo como mi rubio amigo nos observaba
entre confundido y desconfiado-. ¿Y ustedes qué onda?
Drew: -sonrió aún más- ¿por qué no me
dijiste que conocías a una linda latina de _____(tu país)?- inquirió, confundiendo
a su primo aún más.
Niall: ¿______(tu país)? ¿Qué es eso?-
ahora sí, no entendía un carajo. Puse los ojos en blanco. Niall para geografía
es igual que yo en matemática. ¿O sea? Una caca.
Tu: Ta, Niall. Andá a estudiar el mapa
mundi- bromeé, haciendo que Drew riera. Como extrañaba esa risa... Ronca, y
al mismo tiempo suave. Podría quedarme todo el día escuchándola. Me acuerdo,
cuando éramos chicos y amaba contarle chistes para que riera. Obvio que no se
reía de mis chistes, porque eran de lo más boludos. Se reía de mí. Y luego yo lo
golpeaba. Y él a mí. Y terminábamos jugando una guerra de almohadas. Y...
(En español)
Drew: Eh, ______(tu nombre)- parpadeé,
dirigiendo mi vista hacia él, dejando de lado los recuerdos. -Te quedaste
colgada- me hizo ver, tiernamente. Lo abracé aún más fuerte, ignorando la
mirada rara que Niall nos estaba obsequiando. Porque además de no entender
porqué estábamos abrazados, estábamos hablando en español. Y aunque el rubio
sepa el idioma... Veamos, Niall es Niall. No esperemos mucho.
Tu: Todavía no caigo que estés acá.
Pensé que no te iba a volver a ver nunca más.
Drew: Ni yo. No puedo creerlo... Seguís
siendo la misma enana de siempre- rió, y no pude evitar imitarlo. Como les
decía, amo su risa.
Tu: ¡Calláte!- exigí, pero mis risas no
imponían ningún tipo de autoridad. -Estoy más alta- le hice ver, obvia. Ponele
que crecí algunos muchos centímetros, ¿no? Tampoco la pavada. Que sean
todos demasiado altos no es mi problema.
Drew: Y seguís traumada con tu
altura...- volvió a reír, esta vez ganándose un golpe en joda de mi parte.
Tu: Hace más de seis años que no nos
vemos, ¿y me venís a hablar de mi estatura?- alcé una ceja, fingiendo estar
ofendida. Me sonrió aún más dulcemente.
Drew: Te estoy jodiendo boba. Estás
preciosa- dijo, sincero. Sonreí.
Tu: Vos también. Me imagino todas las
minas que debés de tener atrás...
Drew: Pocas- me guiñó un ojo pícaro,
haciéndome reír. Siempre fue el típico ganador, con el que todas querían estar.
Y eso que éramos unos pendejos, 10 años teníamos. Imagino que no cambió ni un
poquito.
Tu: Claro, porq...- un carraspeo me
interrumpió. Miré a Niall, que estaba de brazos cruzados, y con cara de chupar
un limón.
(En inglés)
Niall: ¿Alguien me explica qué está
pasando? Porque no entiendo nada, y encima se ponen a hablar en español-
exigió, haciendo un puchero. Reí, separándome de Drew y yendo hasta sus brazos,
los cuales me recibieron cálidamente.
Tu: Drew era...
Drew: Es...- me corrigió, sonriéndome.
Rodeé los ojos, divertida.
Tu: Un amigo de la infancia- le
expliqué, viendo como la comprensión llegaba a sus ojos.
Niall: ¿En serio?- quiso saber,
sorprendido-. Pero si vos vivías en América- repuso, sin entender.
Tu: Sudamérica- lo corregí-. Y
sí, pero Drew también.
Niall: Pero si él es mi primo y somos
todos irlandeses...
Drew: Tu tía sí, pero mi padre es
latino y nosotros vivíamos allá antes de venir a Europa- le explicó. Re que es
su propio familiar... Esas cosas se tienen que saber, ¿no? Lo que
siempre digo: Niall es Niall.
Niall: ¿Entonces tú- me señaló,
tratando de entender- y tú- señaló a su primo- se conocen desde antes?
Tu: Obviamente- confirmé. El morocho me
guiñó un ojo, ocultando una sonrisa.
Niall: -se rascó la cabeza- ¿no creen
que esto es demasiado loco?- asentí con la cabeza, totalmente de acuerdo. No
puedo creer todavía que tenga a Drew frente a mí. No nos veíamos desde hace
años, y justo lo vengo a encontrar acá. En Inglaterra. En Londres. En la casa
de Niall. Cuánta razón tienen cuando dicen que el mundo es pequeño...
Nos sentamos en los sillones y hablamos
por un largo rato. Bueno, es decir, Drew y yo hablábamos. Niall se dedicaba a
jugar al Candy Crush desde mi Ipod. Cero ganas de unirse a nuestra
conversación. No lo culpo, a decir verdad. Nos la pasamos recordando cosas de
nuestra infancia, como cuándo yo obligaba a Drew a ver las películas de Barbie.
Todas y cada una de ellas. Es que, ¿cómo no hacerlo? Son mis películas
favoritas en el mundo. Las amo. Aún sigo viéndolas, en especial cuando hay
algún estreno...
Drew: Nunca voy a olvidar cuando me
hiciste disfrazar del Cascanueces. Tuve que usar ese ridículo sombrero
toda la tarde mientras tú comías todas las nueces- recordó, riendo fuertemente.
Yo también reí; me acordaba clarito. Lo peor es que no me gustan mucho las
nueces... Las comí para molestarlo. Amo molestar a la gente, ya deberían
saberlo.
Tu: Dale, no te hagas la víctima. Bien
que después andabas tirando pasos turros de ballet por toda la sala- me burlé,
riendo aún más fuerte.
Drew: ¡Mentira! Te estaba explicando a
vos cómo hacerlos, porque eras más tronca para el baile que mi perro Oso...- se
defendió, poniéndose colorado. ¡Ajá! ¡Sigue haciéndolo! Cada vez que miente, se
pone colorado.
Niall: ¿Tenías un perro que se llamaba
Oso?- preguntó, de pronto. No había emitido palabra en todo el rato.
Drew: No preguntes por qué- se limitó a
decir, ensimismado. Reí, incapaz de dejar ahí el asunto.
Tu: ¡Sí! Preguntá por qué, dale.
Niall: ¿Por?- enarcó una ceja,
divertido. Ambos mirábamos a Drew esperando su respuesta.
Drew: Bueno... -el sonido de mi celular
lo interrumpió. Sonrió triunfante, salvado por la campana, mientras yo rodaba
mis ojos y sacaba el Blackberry de mi bolsillo. Harry. Sonreí, y me paré para
hablar con él.
-INICIO VÍA TELEFÓNICA-
Tu: ¿Qué onda?- pregunté, una vez
alejada de los sillones.
Harry: Hola princesa- ignoré el apodo,
estaba demasiado contenta como para discutir. Además, ¿qué esperaba? Llevo
intentando que deje de llamarme así desde que llegué. -¿Qué haces?
Tu: Estoy en lo de Niall. ¿Y tú?
Harry: Con Gemma. Salimos a dar unas
vueltas por ahí. Ya sabes, pasar tiempo con tu hermana- mientras hablaba,
dirigí mi vista hacia los sillones. Los chicos se habían puesto a jugar al Play Station, y ambos tenían terrible
cara de concentrados, con sus lenguas afueras y los ojos entrecerrados. Reí
ante la escena. -¿De qué te ríes?- preguntó Harry curioso, del otro lado de la
línea.
Tu: Am, nada, no importa- le resté
importancia. -Oye, ¿hablamos luego, sí? Mandále un beso a Gemma de mi parte.
Harry: Dale, después hablamos linda.
Pásatelo bien con el rubio- y cortó.
-FINAL VÍA TELEFÓNICA-
Guardé nuevamente el celular en mi
bolsillo trasero del short, y volví a sentarme en los sillones; solo que esta
vez en el que se encontraba Niall antes, puesto que había ocupado mi lugar para
jugar al play con su primo. Ambos ni
notaron mi presencia, de lo concentrados que estaban. Les hablé varias veces, y
ni bola. ¿Es joda? Hombres. Mejor voy a hacer algo más productivo...
Salí de la sala, y busqué a Maura en la
cocina, para preguntarle por el baño. Me estaba haciendo pichí. Y en esa casa
siempre me terminaba perdiendo... Muy amable, me explicó cómo encontrarlo:
arriba, la primera puerta a la izquierda. Le agradecí, y subí rápidamente; o me
apuraba o me meaba en plena escalera.
Luego de hacer mis necesidades, salí,
y, adivinando que seguirían jugando al Play Station y que no me iban a
dar pelota, decidí ir a la habitación de Niall a encontrar algo para hacer.
(AVISO IMPORTANTE: En el capítulo anterior, al final del todo, ¿vieron
que rayita -ustedes- le preguntó a Niall dónde estaban cuando llegaron a la
casa, tipo no la reconoció? Bueno, les pido un favorcito; hagan de cuenta que
no dijo nada. Porque me olvidé completamente que rayita ya ha estado mil veces
en esa casa. Y ta, obviamente sí estuvo ahí. Porque Niall aún vive con sus
padres, como pasó siempre en la novela. Pero me había olvidado. Lo de que no
conocían a Maura está bien porque nunca la habían visto hasta ahora. Así que
solo eso. Perdón, me distraje cuando escribí el cap anterior y ahora me di
cuenta. Nada más, sigan leyendo.)
Me dirigí al cuarto del rubio, que
quedaba al final del pasillo, y entré, como dueño por su casa. Nada más que esa
no era mi casa, ni mi cuarto, ni nada, jajaj. Pero estaba aburrida, así que no
importa.
Meditando qué podía hacer a
continuación, me senté en la silla del escritorio y comencé a ojear entre sus
CDs. Cher Lloyd, 5
Seconds Of Summer, McFly, Bon Jovi, The Killers, Justin Bieber, Jay Z, Kanye
West... Y bastantes más. Puse en el equipo
de audio uno de los CDs de McFly y pasé las canciones hasta que ''Lies''
comenzó a sonar. Amo esa canción. Seguí mirando entre sus cosas... Más tierno:
tenía una caja de zapatos en dónde guardaba cartas hechas por sus fans. ¡Me
muero! Que adorable.
Dediqué varios minutos en leer algunas;
porque eran muchísimas. Luego cerré la caja, y me paré de la silla. Caminé
hasta su cama aún sin tender, y tomé su laptop, que permanecía allí arriba. La
abrí: estaba su twitter abierto. Genial.
Luego de escribir un lindo tweet
diciendo la mejor amiga del mundo qué era, se me ocurrió seguir a algunas fans
que le pedían follow back. Estuve un rato largo en eso... Pero por lo menos
dejé a muchas chicas contentas. Así que estuvo bien. Ya aburrida, decidí
conectarme a Skype. Necesitaba hablar con alguien, o iba a terminar colapsando
del aburrimiento. ¿En dónde quedó eso de ''pasar una tarde por el día del
amigo''? Las pelotas. Nunca más le hago caso a Niall... ¡Me hizo levantarme al
pedo! Dios.
Me fijé en los contactos que estaban
conectados... A un 90% de usuarios no los conocía. Busqué a alguna de las
chicas a ver si las tenía... Solo tenía a Male, pero estaba desconectada.
Mierda. Veamos, los chicos... ¡Liam! Genial. Le envié una invitación para iniciar
la conversación, la cual aceptó en seguida.
-INICIO DE LA CONVERSACIÓN VÍA SKYPE-
Liam: Boba- me saludó, de buen humor.
Tu: Bobo- saludé a su vez.
Liam: ¿Qué hacés en la computadora de
Niall?- preguntó curioso, mientras comía algo no definible... Quizás torta de
manzana, no lo sé.
Tu: Estoy aburrida en su casa y Niall
no me da bola- expliqué. -¿Y tú, qué hacías?
Liam: Me preparaba para salir...- dijo,
misteriosamente. Alto ahí. ¿Liam? ¿Salir? Eso significa que saldrá con alguien.
Y si mi intuición no me falla... ¡Sí! ¡Yo sabía! Pa, soy Cupido versión mujer o
qué. Sonreí para mis adentros, dispuesta a hacer que cantara. Quería detalles.
Ya.
Tu: ¿A dónde vas?- pregunté,
casualmente. Mantuvo una expresión normal.
Liam: Al cine, ya sabes...
Tu: -sonreí- si vas al cine, vas
acompañado, ¿cierto?
Liam: Ajá...- no lo dejé continuar.
Tu: Y si vas acompañado significa que
saldrás con una chica, ¿o no? Y no en plan amigos, porque si no, no estaríamos
hablando de esto- enarcó una ceja, divertido, a sabiendas que ya lo había
descubierto. ¡Ja! Por favor. Ni que se me fueran a escapar estas cosas...
Liam: ¿Y por qué no puedo salir con un chico?-
preguntó, fingiendo inocencia. Sonreí, cínica.
Tu: Porque eso significa que eres gay.
Y sé que no lo eres porque te atrae Nátali y obviamente no es un chico- me
limité a decir, obvia. Rió, consciente de que no tenía escapatoria.
Liam: Prométeme que nadie se va a
enterar. Y con nadie me refiero a Niall- exigió. Lo entiendo. Para Niall, la
palabra ''secreto'' no existe.
Tu: Descuida. Y ahora, ¡detalles!
¿Cuándo la invitaste a salir? ¿Es la primera vez o ya lo han hecho antes? ¿Qué
te vas a poner? Ni se te ocurra llevarla a Nando's, eh...
Liam: -rió- ¿terminaste con el
interrogatorio?
Tu: Cállate y cuenta- exigí,
emocionada. ¿Se dan cuenta? Ahora podremos salir los cuatro juntos. Nátali,
Liam, Harry y yo... Sería genial. Siempre quise una cita doble. Pero con lo
lentos que son los boludos estos, nunca pensé que llegaría el día... Menos mal
que Liam se avivó. ¡Y Nátali! La voy a matar. No me contó nada la perra.
Liam: Bueno... Nada. La invité a salir
y punto- me informó. Debe de estar bromeando.
Tu: -rodeé los ojos- Liam, detalles.
Liam: ¿Y qué querés que te diga?- quiso
saber, divertido. No quitaba esa estúpida sonrisa de su rostro... Se nota que
está emocionado. ¡Yo sabía! Siempre supe que le gustaba Nátali. ¿No les dije?
Mi intuición no falla...
Tu: ¿Es su primera cita?
Liam: Sip.
Tu: ¿Y qué harán?
Liam: La llevaré al cine y luego a
cenar... Lo normal.
Tu: ¿Y así pensás conquistarla, Payne?
¿Con ''lo normal''?- bufé. Que poca imaginación, eh.
Liam: ¿Y qué querés que haga? No sé..
Tampoco quiero asustarla. Quiero que se sienta cómoda, ya sabes...
Tu: -sonreí. Le re gusta. -¿Qué dices
de llevarla al London Eye? Algo romántico Payne. Usa tu imaginación para algo.
Si no, la pobre mina se va a aburrir.
Liam: Puede ser... -volteó su cabeza,
mientras que dos siluetas masculinas irrumpían en la habitación detrás de él.
Ambas se acercaron, y en la pantalla aparecieron los rostros sonrientes de
Louis y Harry.
Tu: Hola chicos- saludé alegre. Ambos
me sonrieron del mismo modo.
Lou: Hola enana, ¿vienes?- supuse que
estaban los tres en su casa. Y sí. ¿Dónde más van a estar? Dah.
Tu: No puedo. Estoy en lo de Niall-
expliqué, riendo al ver cómo Liam molestaba a Harry al despeinarlo.
Harry: ¿Seguís ahí?- quiso saber, con
expresión celosa. Volví a reír.
Tu: Si. Pero estoy aburrida- hice
puchero. -¿Cómo te fue con Gemma?
Harry: -se encogió de hombros- bien,
supongo. -Aunque no agregó nada más, lo conocía demasiado. Estaba ocultando
algo, lo decían sus ojos. ¿Pero qué? Capaz que no podía decir nada porque los
chicos estaban allí. O quizás soy solamente yo. En fin.
Tu: Oigan, -decidí cambiar de tema- ¿y
si hacemos algo más tarde?
Harry: ¿Algo como qué?- preguntó con
expresión pervertida. Louis le pegó un manotazo en la cabeza. -¡Auch! ¿Y eso
por qué imbécil?
Lou: No mires a mi niña así- lo
rezongó, haciéndome reír fuertemente, junto a Liam.
Harry: No es tu niña. Es mía- señaló,
sobándose la cabeza. Enarqué una ceja.
Tu: No soy la niña de nadie- me
defendí.
Harry: Bueno, pero rezongalo a él.
Lou: No, él fue el que te miró con cara
de violador.
Tu: -volví a reír- ¿Liam?- pedí, entre
risas.
Liam: -estaba en el mismo estado que
yo- Seguro. -Y sin hacer falta más explicaciones, les pegó a ambos una fuerte
palmada en la cabeza.
Tu: Gracias- sonreí, divertida. En eso,
mi celular comienza a sonar... Niall. Atendí, y lo puse en altavoz para que los
demás pudieran escuchar también.
Tu: Hola feo- saludé.
Niall: ¿Dónde estás boluda? No me
avisaste que te ibas...
Tu: No me fui idiota. Estoy en tu
cuarto.
Niall: ¿Eh? ¿Por?
Liam: Hola Nialler- saludó Liam
fuertemente para que se escuchara.
Lou: ¿Qué onda?
Niall: ¿Esos son los chicos?
Harry: Obvio, rubio divino- bromeó.
Niall: Ay Hazza, vení para acá que te
hago de todo- le siguió la joda.
Harry: Pero vapai papote- todos reímos
ante tantas boludeces. -Bo inútil, ¿te llevás a la enana y encima no le hablás?
¿Cuál hacés?- inquirió, ahora hablando en serio.
Niall: ¿Yo? Fue ella la que no me
hablaba. Hasta tuve que jugar al Candy
Crush del embola- ¿perdón? Si él ama ese juego. Ahora que no se venga a
hacer le resentido.
Harry: ¿Cómo, por qué no te hablaba?-
miré la expresión de Harry, ahora curioso.
Tu: Bueno, basta- zanjé el tema.
-¿Suben o qué?
Niall: No, bajá vos que mi vieja hizo
torta de chocolate. Y por acá te extrañan- agregó. Conociéndolo, únicamente
para hacer que Harry se molestara. Lo que termina molestándome a mí. ¿Ven lo
que les digo? Es un resentido. Pero la torta de chocolate puede con todo.
Tu: Okey, ya bajo- apreté el botón de
finalizar llamada, y me dirigí nuevamente a los chicos. -¿Nos vemos luego?
Harry: ¿Quién te extraña?- preguntó,
cruzándose de brazos. Puse los ojos en blanco, divertida.
Tu: Nada, Harry, nada. -Si me ponía a
explicarle ahora que conocía a Drew, me quedaba sin torta. Y tenía hambre, así
que no. -¿Su casa o la mía?
Lou: La tuya. Nosotros llevamos la
comida.
Tu: Bien. Avísenle a Zayn.
Harry: Okey- accedió Harry, aún
refunfuñando. Sonreí, y me desconecté.
-FINAL DE LA CONVERSACIÓN VÍA SKYPE-
Cerré la compu y bajé rápidamente hasta
la planta baja; moría de hambre. Pensando que iban a estar en la sala de estar,
me sorprendí al encontrar a ambos en el living. Como sea, tomé un pedazo de
torta de la mesa ratona y me senté junto a Niall, quién pasó su brazo izquierdo
por mis hombros.
Drew: ¿Dónde estabas?- preguntó,
curioso, mientras se llevaba a la boca un poco de torta. Que por cierto, estaba
ri-quí-si-ma. Si mi madre supiera cocinar estas cosas...
Tu: Arriba, hablando por Skype. No
pensé que fueran a notar mi ausencia, igual- ironicé.
Drew: Perdón. Sabés que los videojuegos
me pueden- y es verdad. Lo sé porque desde chico que es así. Sonreí.
Tu: Sí, ya sé. Aunque, seamos
sinceros... Sabés que te como en el Fifa.
Drew: ¿Qué decís? Estás borracha.
Tu: Estoy re sobria. Y te re gano.
Drew: ¿Querés ver cómo no?
Tu: ¿Y vos querés ver cómo si?-
contraataqué, enarcando una ceja.
Drew: -sonrió confiado- dale.
Niall: Esperen- dijo, uniéndose a la
conversación. -Háganlo más interesante.
Tu: ¿A qué te referís con ''más
interesante''?- quise saber, curiosa.
Niall: Apuesten algo- propuso, dándole
otro bocado enorme a la torta.
Tu: -miré a Drew- me parece bien. ¿Qué
apostamos?
Drew: -se lo pensó un momento...- Ya
sé. Si yo gano, tenés que hacer algo que yo te pida. Sin objeciones- bien, captó
mi atención.
Tu: ¿Qué cosa tengo que hacer?
Drew: Lo que sea. No podés negarte.
Me lo pensé por un momento... Tan malo
no puede ser, ¿verdad? Es decir, si llegara a perder. Cosa que no creo que
ocurra. No porque sea una experta jugando al play, eso es obvio. Juego
como el culo. Pero.. ¿adivinen quién lo hace peor? ¡Ajá! Drew Roy. En serio, es
pésimo jugando al play. Cuando éramos chicos siempre le ganaba.. Bueno, jugando
al Family y al Play Station 1. Todavía no había tanta tecnología, jajaj. Pero no
importa. No creo que haya cambiado nada su forma de jugar... Una caca. Le gano
mil y una veces. Estoy segura.
Tu: Y si yo gano- añadí, confiada-
tenés que volverte a disfrazar de Cascanueces y bailar ballet, como
cuando éramos niños-. Moriría por verlo. Pero lo voy a ver, es obvio. Así que
no tengo que morir... Ta.
Drew: Está bien. Es un trato- acercó su
mano hasta mí, y yo se la estreché, segura. Porque, iba a ganar. Obviamente.
(Una hora más tarde)
Tu: Te odio. Te odio, te odio, te odio.
Drew: -volvió a reír, como llevaba
haciéndolo hacía 15 minutos-. No seas rencorosa, es feo...
Tu: ¡Me estafaste! ¡No me avistaste que
ya no eras un culo jugando!
Drew: -se llevó la mano al pecho, con
cara de dolor-. ¡Auch! Tus palabras me lastiman- bromeó, mientras él y Niall
reían.
Tu: Los odio- aseguré. MIERDA. PERDÍ.
¿A quién se le hubiera ocurrido que ya no jugaba tan mal? Es decir, tendrían
que haberlo visto cuando éramos pequeños. No tenía CORDINACIÓN en sus manos. Lo
juro. ¿Y ahora? Puto. Me engañó. Y Niall también. Porque estoy segura de que re
sabía, y propuso lo de la apuesta para que perdiera. Lo cual es genial, porque ahora tendré que hacer
vaya a saber qué mierda que se le ocurra a Drew. Idiotas. Me siento estafada.
En ese momento, suena el celular de
Drew. Y digo de Drew, porque obviamente conozco el sonido del mío. Y el de
Niall es, actualmente -porque cambia de rington como de calzón- Niggas in
Paris de Jay-Z y Kanye West.
Atendió, y luego de unos cortos minutos
en los cuales Niall se dedicó a ''hacerme'' una pequeña trenza con un mechón de
mi pelo- intentar hacerme. Hay que valorar su esfuerzo, por lo menos-
volvió a guardarse el teléfono en el bolsillo.
Drew: Bueno, chicos, me tengo que ir-
anunció, y en mi mente solo pude pensar ''¿ya se va?''. Acabábamos de
reencontrarnos. No quería que se fuer aún.
Drew: -supongo que se dio cuenta de lo
que estaba pensando, porque no dudó en ir a abrazarme, ahora que los tres estábamos
de pie-. No te preocupes, enana. Voy a cobrarte mi premio- me recordó. Cierto.
Estúpida apuesta. Pero por lo menos, me garantizaba que nos volveríamos a ver,
más pronto que tarde.
Tu: -bufé, fingiendo molestarme por eso
último-. Ni me lo recuerdes- pedí, sonriendo. Envolví su cintura con mis
brazos, y él me rodeó los hombros, fundiéndonos en un lindo abrazo.
Niall: Ya, ya, que me pongo celoso- se
quejó, haciendo que nos separamos, unos segundos más tarde. Ambos reímos,
mirándolo feo, en joda.
Tu: ¿Tienes mi número, verdad?-
pregunté, para corroborar. Se lo había dado hace un rato.
Drew: Sí. ¿Y tú el mío?
Tu: Claro.
Drew: Genial. Luego te llamo enana. Nos
vemos- y tras darme un último abrazo y saludar a Niall con una palmada
amistosa, se fue.
Niall: Ay, si, ¿tienes mi número mi
amor?- soltó, de pronto, haciéndome burlas. Lo miré feo, pero sin poder ocultar
mi sonrisa.
Tu: Cállate idiota- me limité a decir,
lanzándole un almohadón del sillón a la cara.
Niall: Está bien, yo me callo. Pero que
Harry no se entere de esto porque se te arma, eh...
Tu: ¿Que no se entere de qué?
Niall: Veamos. Los dos sabemos cómo es
Harry de celoso. Y si se llega a enterar de que te vuelves a encontrar con tu
amigo de la infancia, que además, está divino, se te va a armar...
Tu: No digas pavadas, boludo. Y ahora
dale, muévete que los chicos iban a ir para casa a dormir- cambié rápidamente
de tema, haciendo que se dejara de decir estupideces y fuera a buscar sus
cosas.
(Rato más tarde)
Luego de comer las
hamburguesas de McDonald’s que trajeron los chicos, nos dispusimos a elegir qué
película mirar. Liam no estaba –Nátali, Nátali, Nátali… ja. Aunque los chicos
no sabían. Les dijo que iría a visitar a sus primos.- Zayn y Harry querían una
de terror. A Louis y Niall les daba igual, aunque preferían una comedia. Y yo…
Bueno. Romántica. Obviamente. ¿Yo, viendo una película de terror? No, gracias.
Ya he visto bastantes a lo largo de mi vida, y después me quedo traumada. Ni
puedo ir al baño tranquila. Así que no. O romántica o nada.
Tu: The
Last Song, porfa- pedí, por
onceaba vez en el correr de la noche.
Niall: Nadie va a ver una película
romántica, ______(tu nombre)- habló el muy valiente. Pero dale pelotudo. Si
después se caga todo, como yo…
Tu: ¿P.s: I love you?- propuse.
Harry: Ya la vi mil quinientas veces
princesa. No- se negó, jugando con un mechón de mi pelo, sentado al lado mío en
el sillón. Bufé.
Tu: ¿The
Lucky One?- intenté, una vez más. Me niego a tener pesadillas de noche.
Zayn: -rió-. No, dale. Te prometo que no
va a ser de mucho miedo.
Tu: Justo a vos no te voy a hacer caso- si
algo sé de Zayn, es que ama las
películas de terror. Ni se muta. Hijo de puta, ¿y me quiere babosear eso en la
cara? ¡Déjenme llorar con Leo DiCaprio tranquila!
Zayn: Vení con Lou y conmigo y la elegimos
junta. Así sabés que te va a gustar- propuso. Medité su propuesta. Era eso, o
tener que bancarme algo como American
Horror Story o Freddy. No
gracias. Acepto.
Niall y Harry se quedaron en casa, y yo
fui con los chicos hasta el videoclub que quedaba a unas cuadras. A no ser un
par de chicas que los reconocieron, no tuvimos problemas. Y eso que fuimos
caminando –bueno, yo a caballito de Louis. Pero es casi lo mismo-. Al final,
llegamos a un acuerdo. Que no fuera tan de terror y sí más de suspenso.
Alquilamos Kill for me. No parecía
tan mala, así que está bien. Me la banco.
De nuevo en mi casa, comenzó el debate de
quién dormía con quién, y cómo y dónde dormiríamos. A pedido de mi madre y Des,
que habían llegado un poco más temprano, les hicimos caso y subimos todos a dormir
a mi cuarto: la noche estaba muy fría y con dormir en el piso solo
conseguiríamos enfermarnos. Y como el suelo de mi habitación es de moqueta…
Luego de darles unos cuantos acolchados,
almohadas y frazadas, nos acomodamos así: Niall y yo dormiríamos en mi cama. Y
bueno, el resto que se acomode como quiera. No me importa. Solo quiero ver la
estúpida película en un lugar lejos del piso. Del piso, la puerta, la ventana,
y todo objeto viviente o no viviente. Lo que sea. Pero que no pueda lastimarme.
A pedido de Niall, que se hacía el
machote, apagamos todas las luces. Genial. Todo oscuro, y la película a punto
de empezar. ¿Por qué mierda acepté ver esto? Habiendo tantas otras lindas, como
El mago de Oz, Madagascar, Los Pitufos… No una puta película de miedo. Mierda.
La bendita película comenzó, y me dediqué
la mayor parte del tiempo a taparme la cara con la frazada. Eso, o apretarle
muy fuerte el brazo a Niall. Al final, y no sé en qué parte de la película
porque tenía la cara tapada, el pobre se agotó de que le clavara mis uñas en la
piel, y se cambió de lugar. Al piso. Muchísimas gracias mejor amigo… ojalá
aparezca el padre de la psicópata y lo mate. Por mala persona. Agh.
Luego de unos minutos, alguien se subió en
mi cama. Chillé, y no paré de chillar hasta que la risa de Harry me calló. Eso,
y los ‘’shh’’ de todos. Imbéciles. Se hacen los machos y yo se que están todos
cagados…
Harry: Soy yo, boluda- me dijo, sentándose
a mi lado. Bueno, ta… con tanta oscuridad no podía saber.
No le respondí, y seguí haciendo lo que
estaba haciendo: jugando al Subway Surf. Al ver lo que estaba haciendo, soltó
una pequeña risa, antes de quitarme el Ipod.
Ah, no. Que me lo devuelva.
Tu: Dame mi Ipod- exigí en voz baja, esta
vez sí pudiendo verlo a la cara, ya que la luz del aparato nos alumbraba a
ambos.
Harry: No. Mirá la película- se limitó a
decir, guardándoselo en el bolsillo y dirigiendo su vista al frente, como si
nada.
Tu: ¡Harry!- exclamé, aún en voz baja-.
Dale. No jodas.
Harry: Te estoy haciendo un favor. Es
genial- dijo, obviamente refiriéndose a la mierda que estaban viendo.
Tu: Me alegro por vos. Pero lo quiero de
vuelta- ordené.
Harry: Y yo quiero tantas cosas…
Tu: ¡Harry Edward
Styles!- me quejé. Rió.
Tu: Mirala por mí, porfa. Te prometo que
no da tanto miedo.
Tu: No la miro porque tenga miedo, tarado-
mentí. Odio reconocer esas cosas.
Harry: Ah, ¿no?- obviamente no me creía ni
u poco- ¿y por qué, entonces?
Tu: Porque es muy aburrida. No me va-
dije, fingiendo aburrimiento. Volvió a reír.
Harry: Estás loca, ¿sabías?
Tu: Me lo han dicho varias veces, sí- le
seguí la joda. Ambos reímos bajito, y me acurruqué contra su pecho. No dudó en
pasar su brazo sobe mis hombros, haciéndome sentir protegida.
Harry: Hoy te extrañé- murmuró, al cabo de
unos segundos en completo silencio, en los que (aunque no me crean) presté
atención a la película.
Sonreí ante esto.
Tu: Yo también. Pero te divertiste,
¿cierto?
Harry: Ajá- respondió distraído. Eso me llamó
la atención. Me recordó a cómo actuó hoy cuando hablábamos por Skype…
Tu: Hey, ¿pasó algo?- pregunté, intrigada.
Harry: No, bueno, sí…
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Chicas!!!!!! Acá está. El capítulo 60. Me
tardé, ya sé. Pero bueno, en la entrada anterior ya les expliqué lo que tenía
que explicar. Me alegro que hayan entendido, y gracias a todas aquellas que se
preocuparon por mí y me preguntaban cómo estaba, etc. Son un amor, saben que
las adoro. Y nada. No me voy a demorar mucho porque ya está la comida y mi
madre está atomizando para que vaya. Tampoco tengo mucho que decirles,
solamente gracias por seguir leyendo la nove y comentando a pesar de que me
pasé un mes sin subirles un capítulo. Muchas gracias por la paciencia. Y termino
el capítulo ahí porque amo dejarlas con la intriga, jajajaja. No olviden
comentar, y unirse al blog las que todavía no están unidas.
Les dejo mi ask: ask.fm/seemehoran
Las amo mucho,
Naty
PD: Las que quieran agregarme a facebook,
mándenme el link a mi ask y yo las agrego. Pero la condición que pongo es que
no me publiquen en el muro ni nada cosas, tipo cuando vas a subir, o me gusta
tu novela, o la odio, o lo que sea. Por el hecho de que mis amigos no saben que
yo escribo una novela de los chicos, es como mi secreto, mi otro mundo. Y es
privado. Entonces ta. Si quieren hablar conmigo al chat, me encantaría hacerlo.
Escríbanme EN EL ASK el link de su fb y yo las agrego. Beso enorme a todas.